lunes, 20 de agosto de 2018

EL CONCEPTO DE LA CIENCIA EN EL RECREO ESCOLAR



LA CIENCIA EN LOS TIEMPOS DE RE CREO

Por: Lic. Mario Rios Quispe

Referirnos al trabajo científico extendido a las escuelas públicas resulta ya un esfuerzo interesante de ligar a la población con las ideas y práctica de la ciencia; se hace trabajo por ejemplo en los planetarios con la visita de los estudiantes; se hace también en los museos de ciencia y tecnología, el Museo de Electricidad de Barranco; Parque de la imaginación (cercano a la Universidad Católica)  o el Museo Histórico de Ciencias Físicas de la UNMSM del cual fui uno de los fundadores, como consta en los registros de la Facultad. Otro de los trabajos desarrollado mayormente en países del primer mundo es ciencia en la calle, donde los promotores de CyT y hasta los propios científicos con mucho entusiasmo educador van a mostrar sus experiencias o experimentos novedosos, sencillos, pero de alto impacto como el tema ¿vemos la radiactividad?, Generadores de Alto Voltaje como el Van der Graff. Todos estos programas y proyectos no tienen la presión curricular y de la organización del trabajo pedagógico mas si tiene la condición de tomar temas actualizados de la ciencia y generar un entusiasmo hacia el conocimiento científico y de cómo trabajan los científicos.
Divulgar y popularizar la ciencia es un trabajo que está colateral al trabajo pedagógico no es complementario pues tiene una finalidad científica y hasta política, recordemos al mismo Graham Bell que para tener apoyo y a su esfuerzo descubridor e innovador recurría a las exposiciones y demostraciones en las calles y al aire libre, su esfuerzo era más práctico y de utilidad directa; para países como el nuestro la divulgación y popularización de la ciencia tiene mas un esfuerzo cultural e ideológico tiene un propósito de ganar la mente de las ingentes masas populares por lograr – aunque de forma ideal muchas veces – el pretendido objetivos de que adquieran un criterio científico, y lograr y lograr así  entre otras cosas, que mas jóvenes encuentre un amor e inclinación por la ciencia, no solo como elección profesional sino y también como una forma de vida.
Somos objetivos en afirmar que de parte del Estado y específicamente del MINEDU  hay un nulo interés en apoyar los esfuerzos de la ciencia y específicamente los esfuerzos de la ciencia en la educación, tal vez porque parten de la idea que la ciencia es comprar equipos y módulos de laboratorio para los colegios del Estado y la ciencia aparecerá – por tanto - por arte de magia; o que los profesores deben ser capacitados en como enseñar que más bien en el que enseñar; como organizar el trabajo pedagógico en CA y CTA o aprender más sobre la ciencia y como trabajan los científicos, escuchando y convocando a los mismos científicos o profesionales de la ciencia atendiendo al hecho también, que los conocimientos científicos se “metamorfosean” cada día, y esto es irónico cuando el Estado Peruano ha asumido el plan estratégico de ser un país competitivo, cuando bien sabemos que toda competitividad pasa por el desarrollo de ciencia y tecnología, y digo desarrollo porque la tecnología no es solo los científicos y los instrumentos de la ciencia, es también la técnica, la cultura científica y su popularización, hoy hablaríamos tomando alguna frase abarcadora de Gramsci “el bloque cultural histórico de la ciencia”.
Así las escuelas del Perú deberían contar con un laboratorio bajo el concepto nuevo de ser versátil y no los convencionales laboratorios de ciencias de una universidad, pues nuestros objetivos son educativos culturales y por ende muy asociados al concepto y a su aplicación en la vida diaria. El personal de laboratorio debería ser la persona profesional en ciencia debidamente formado en algunas de las disciplinas científicas, que si bien, cumple labores gestión tanto de inventarios, control de sesiones de trabajo y programación; también es cierto siendo formado en al ciencia con cierta orientación de pedagógica, puede apoyar al maestro en el manejo de los equipos de laboratorio tanto de orientaciones técnicas como en los temas de la ciencia. Cito un caso real que me tocó vivir: la  Unión Astronómica Internacional (UAI) lanzó el comunicado mundial que Plutón ya no sería considerado un planeta y que por cierto había una serie de argumentaciones científicas de porque no debía ser un planeta, entre otras cosas porque se había observado 40 “planetas” similares a Plutón y eso iba a generar un problema en la clasificación científica, sin embargo esto dio lugar a construir el concepto de planetoide o planeta enano como una reclasificación de los planetas; así podemos decir que los científicos pueden “actualizar” los contenidos y entonces el trabajo pedagógico se haría mas interesante. Podemos citar también los esfuerzos científicos que realizan los científicos y buscar las condiciones de habitabilidad en Marte y que tiene que ver con información muy precisa y actualizada, pero además popularizada por los propios científicos para la educación en general.
Esta situación señalada de recursos que se desperdician y personal que no recibe entrenamiento en ciencia, nos infiere en señalar que estamos desperdiciando oportunidades inmensas de crear bases para hacer ciencia en nuestro país y específicamente en las escuelas básicas del Estado, estamos perdiendo valiosísima información y valioso talento a futuro, aunque sabemos que la ciencia igual saldrá adelante, pero el problema es tiempo; y los profesionales de la ciencia están en la obligación moral de “predicar” promover o “marketear” la ciencia pues es una tema nacional de desafío hacia la competitividad, todos los países lo han hecho, tuvieron sus tradicionales ingresos económicos y aumento de PBI con los commodities, turismo y gastronomía, pero nada es más productivo y de alta productividad que la ciencia y su concreción que es la tecnología..
Ante estos hechos lanzo como propuesta “Ciencia Re Creo”, que es un espacio de 15 minutos en un inicio semanal de sacar los equipos y módulos de laboratorio a los pasadizos, al aire libre para que los alumnos que quisieran, disfruten del conocimiento científico y sus cosas paradójicas e impactantes que tiene con temas de actualidad científica, experimentos impresionantes u observaciones a través del microscopio o telescopio que motive el interés por la ciencia. Como se sabe no ocupa un espacio pedagógico, no cruza las horas de clase del profesor, y más bien el trabajo de los responsables de laboratorio se hace más productivo, se genera el entusiasmo por usar este recurso de aprendizaje.
Por el lado del apoyo externo, podría venir un científico o profesional de la ciencia  a aprovechar esos minutos de “Re Creo” para difundir la ciencia , previa invitación de la dirección del colegio, en este caso los equipos ya deben estar dispuestos para que directamente el profesional de la ciencia haga su trabajo de divulgación, eso exige coordinación práctica entre el profesional de la ciencia y el auxiliar o responsable de laboratorio; esto puede ser retransmitido en las redes sociales e internet y además ser editado con “intro” sobre el trabajo que hacen los laboratorios de ciencias del Estado lo que a futuro sería estar conectado todos los laboratorios de ciencias del país; como se ve podemos lograr impacto social de los esfuerzos de hacer ciencia mediante la divulgación, popularización y socialización; todo está en tener esa convicción y esa misión – visión de que todo esfuerzo, por más pequeño que sea, contribuirá a elevar el nivel cultural científico de la población mediante el aprendizaje y motivación hacia la ciencia por parte de los escolares; porque ellos, una vez motivados, también puedan retransmitir los conocimientos científicos aprendidos en sus hogares y su comunidad cercana.
Ciencia Re Creo se constituye así en una de las estrategias de divulgar y popularizar la ciencia en nuestro país, reitero, en ese gran bloque histórico cultural de científicos – maestros y estudiantes con resonancia en la población por su desarrollo cultural y científico.

mrq@17ago2018