domingo, 3 de abril de 2016

Partidos y Elecciones Generales 2016, Perú

El “Sistema Político Peruano” en la Encrucijada, Elecciones y otras cosas mas

Por: Mario Rios Q.

La situación política económica de nuestro país ha entrado a una etapa muy sensible de hechos que no solo varían rápidamente sino que en un aspecto mas de fondo  la situación se está poniendo tensa con motivo de la desigualdad social y económica que está cada vez mas extremo. Dentro de un contexto económico nacional de una para en la disminución de la inversión pública, inversión extranjera, exportaciones y consumo interno.
La primera cuestión a poner al debate y discusión es que no se trata solo del  descrédito de los partidos políticos ni las malas acciones y dudoso proceder del JNE, a mi juicio es el fracaso de todo el sistema político, La  falta de partidos fuertes cohesivos que oriente su proceder a la mejora de la calidad de vida de la población y educación política en función a salvaguardar un clima de bienestar y desarrollo sostenido.
Después de la situación de los 90, se ha creído que adoptando una posición de outsider se podía llegar a la presidencia, entonces el sentido común de la política partía del paradigma del candidato, del “líder” de la agrupación, pero la historia de los partidos revela que para bien o para mal no se puede tener posicionamiento y sostenibilidad sin partido forjado en ideología y programa  y es que el partido no solo es el que genera al líder, sino también el que lo sostiene.
Veamos casos, Acuña apelando a sus ingentes ingresos económicos por la promotoría de universidades en nuestro país pretendió la presidencia comprando todo bajo el concepto de “plata como cancha” y de primera intención todo salió bien, pero vino los plagios y las falsas autorías intelectuales que reflejó que todo lo hacía precisamente con plata; lo cierto es que un probable gobierno de Acuña hubiera sido  insostenible por la condición en que entra a un gobierno, por lo mismo de la pérdida de credibilidad y confianza.
El caso de Julio Guzmán y su proceso llamado – coloquialmente – vientre de alquiler ha supuesto un escenario de crear un candidato de Laboratorio, lo que le gusta a la gente, un candidato antisistema que nos venda un sueño, pero necesitaba de una organización política entonces  se alquiló un partido y comenzó la campaña, en el proceso no se dieron cuenta que habían partido mal, sin el formalismo que implica de entrar a unas justas, resultado, fueron excluidos de la contienda; sin embargo , hay algo mas de fondo , Guzmán cumplió el papel de atenuar la ira de las masas, desviarla de desacreditar todo el sistema político y los pseudopartidos. Lo cierto es que no hay partido si el conjunto de personas no abraza un sistema de conceptos (ideología y programa), sin la cual es  muy difícil  conseguir lealtad, sacrificio y espíritu de servicio.
PPK es el otro ejemplo versión A-1 de hacer política comprando y vendiendo,  supuestamente se nutre de lo mas graneado de técnicos que haría un buen gobierno, despotrica contra la política tradicional cuando es el, el mas tradicionalista de los políticos criollos, a estas alturas su segundo lugar le da un posicionamiento que haría efectivo un gobierno, pero el nacionalismo y antinorteamericanismo peruano le pasaría rápido la factura, es militante de una derecha a ultranza que cree que todo beneficio al pueblo pasa básicamente por beneficiar primero a la burguesía.
Alan García, el candidato que gastó sus balas atacando a Nadine para que no se perfilara como candidata presidencial, a decir verdad, hizo el trabajo para otros, pues tal parece –según las estadísticas - que no pasará  la valla electoral (por ser alianza) y mucho menos llegará a la segunda vuelta; cometió un error grave en política, creerse centro del mundo, indispensable, que el es el partido. Pues los hechos han demostrado que si bien era el líder indiscutible del APRA, tenía que forjar la organización, pero su petulancia no le ha permitido mirar a futuro, creer ser el  líder del bicentenario sin un partido que lo respalde es iluso, ahora solo se molesta, se amarga pero su gran enemigo está en el mismo y su narcisismo.
Barnechea es el cuarto as bajo la manga de  la derecha peruana extrema, se presenta como un personaje sobrio, émulo de Belaunde Terry, muy técnico y con todos los lauros de ser un pensador y haber trabajado en la banca multilateral, pero igual, representa a un partido viejo que ha perdido movilización nacional, entonces lo que hace Barnechea es vender su imagen, pero sin partido entonces peca de individualismo, juega al antisistema con un fin electorero pero bien sabemos que es un derechista light.
Caso distinto en forma, pero igual en fondo es Keiko, después de la campaña del 2010 ha  forjado al partido con una militancia convencida eso prueba su 30% de voto duro, muy común en sus tiempos en el APRA (sólido norte), además siendo asesorado por gente tras la sombra, ha aplicado el criterio de fracción, acción muy común en las militancias muy organizadas, eso obligó a sacar a Cuculiza, Martha Chávez y Aguinaga de la campaña 2016, pero nada de eso puede ser efectivo si no hay moral en el partido y en sus líderes, de ahí también que así como tiene voto duro, tiene también antivoto, un gobierno de keiko sería duro desde el comienzo  confrontacionista, algo que la clase empresarial quisiera para su manejo en función a los intereses de la burguesía. Además por la historia sabemos que ante una crisis nacional severa, la burguesía busca partidos fuertes, lo fue el caso de la burguesía alemana de 1930.
Verónica representa  supuestamente a las clases populares, como individuo despierta simpatía, pero nuevamente, no hay nada sin partido sólido sin  ideología y el grupo de vero es un frangollo que en el fondo son reciclados izquierdistas que están cumpliendo el negro papel de desvíar de su combativbidad, vendiendo la idea que ella es el cambio y prometiendo cosas que la derecha no querrá que se ponga en marcha desde el comienzo y que Frente Amplio no podrá contener por lo mismo de ser una agrupación de adherentes que solo se juntan en elecciones y que solo viven de la colusión y la pugna , Vero no es el Evo de Bolivia, ni es el Correa de Ecuador que habiendo tenido organizaciones fuertes pudieron contener los vientos derechistas y de alguna manera apoyar a la población aunque con errores y desaciertos.
La lección final de todo lo manifestado es que en estas elecciones generales presidenciales 2016, la derecha ganará de todas maneras, y así ganara Vero,  solo habría  ganado la derecha disfrazada. Por otro lado queda demostrado que las tareas políticas quedan inconclusas que mas que nunca se necesita de un partido al servicio del pueblo y que defienda sus intereses, pero eso es dura brega, las elecciones son un momento político, no es lo mas importante solo es un paso,  lo importante hoy es generar conciencia y cultura política, no necesitamos de los políticos en general, necesitamos hacer política nueva, cuya filosofía sea el desprendimiento y el servicio ciudadano.  En todo caso, La encrucijada es que todo este proceso ha traído como consecuencia una  supuesta marcha contra Keiko; y la pregunta es, porque no una marcha contra Alan, Toledo, PPK, Vero… Porque una marcha contra el TPP APP, privatización del agua… No será que esas inmensas masas marchan  contra el sistema algo que Frente Amplio juega desviándolo y que  los otros partidos ven algo peligroso. Si es marcha contra el sistema  y los “partidos”  agrupados en FA son honestos en asumirlo, eso sí sería una verdadera política cuya dinámica llevaría a un cambio estructural del sistema.