MARCO
EPISTEMOLÓGICO DE LA SALUD COMUNITARIA
Por: Lic. Mario
Rios Quispe ex miembro del Consejo Nacional
de Salud Capacitador en Salud Pública
INNOVAS SAC |
|
De lo anterior vemos que la salud se
centra en el individuo – es restrictivo - lo cual no es malo cuando por ejemplo
de hace un abordaje clínico, sin embargo, vemos también que hay factores
condicionantes en salud como el analfabetismo, alimentación deficiente,
escolaridad débil, distribución inequitativa de la riqueza, empleabilidad
precaria entre otros. Vemos pues que, si no hay las condiciones adecuadas, es
donde se activa las enfermedades, lo que exigirá que el tema de los factores
condicionantes o lo que llaman determinantes de la salud, adquiera un carácter
más abarcador y profundo definiéndose como un fenómeno social.
En tal sentido, La OMS hace algunas
décadas nos ha planteado la salud como un “estado de completo bienestar …” el
término completo lo debemos concebir como meta a alcanzar ante una realidad bio-psico-social
de la persona y también metas a alcanzar por parte de los gobiernos, lo que nos
lleva al mejoramiento integral de los sistemas de salud y a un empoderamiento
de la salud pública como disciplina y praxis. Siendo así, la salud estaría
ligado a los procesos productivos cuya base sería la estructura económica y
social determinada, entonces el concepto de salud sería un proceso biológico
social, pero sobre todo histórico.
Lo que hemos visto líneas arriba es el
tema de la salud en un marco amplio,
necesario para poder ensayar una teorización de la salud comunitaria en el
entendido de que esta deriva de la salud pública con todas las dimensiones y
particularidades que tiene; así, si nos hemos referido a los determinantes
sociales, prevención, promoción, curación, tratamiento rehabilitación entre otros;
no cabe duda que la salud tiene un fuerte componente económico y social y por
ese lado hacemos una acción más integral y efectiva, pues si ya es claro el
carácter eminentemente social y político de la salud, entonces el apoyo de los
profesionales de la salud, debe ser más activo lo que sugiere desarrollar aún
más la salud que tenga que ver con la colectividad, con la comunidad.
Todo esto prueba que demás está decir que
la salud en su expresión más integral no está solamente en la atención médica,
esta configura en la actualidad aspectos sociales e históricos, refuerza la
idea de que “la ciencia médica en su núcleo más interno y esencial, es una
ciencia social” (Newmann Solomon, 1947)
También un concepto más de avanzada como
es lo médico social que incluye medicina comunitaria, estrategia aplicada muy
bien en Cuba, y epidemiología social que es – este último – un aspecto de
monitoreo y evaluación de los procesos epidemiológicos. Por último, tenemos el
holístico social que plantea una educación popular participativa de
empoderamiento en cuanto a los esfuerzos por promover la salud, pero de manera
solidaria y justa. Se entiende a partir de esto que “la salud, que es lo que
buscamos todos, no se circunscribe solo a la atención médica”.
De lo anterior decimos que la salud
comunitaria no es la simple conjunción de salud y comunidad aunque se hace
necesario la precisión conceptual por separado, la conjunción es
cualitativamente distinta a su partes, en el sentido que su no aditividad es
producto de una dinámica social, en la cual – si se quiere – ha aterrizado los
conceptos de salud pública siendo derivación cualitativa de esto último; así
mientras hacemos salud comunitaria, movilizándolos en base a prevención,
mejoramiento y socialización, decimos entonces que la salud pública se
materializa y expresa su particularidad y aplicación; lo interesante de esto es
siendo activo – la salud comunitaria - hay en el fondo un fuerte componente
epidemiológico. Todo esto nos lleva a revisar entonces el concepto de salud
comunitaria en su marco general de salud que nos dé una apertura
epistemológica.
De
primera intención respecto al concepto “salud comunitaria” diremos que esta se
configura como la expresión colectiva de la salud de los mismos, y este término
colectivo nos obliga a analizar el término comunidad en toda su magnitud y
engarzarlo con la salud, y tenemos cosas interesantes como el hecho que existen
varias comunidades en esencia eso implica que se resalta el sentido compartido
de determinada comunidad, así como el grado de cohesión que ayuda mucho a una
intervención efectiva. Otra particularidad interesante es que hoy sabemos
“existen” comunidades virtuales que vienen a ser nuevos escenarios de
comunicación que hoy es una realidad y que está teniendo fuerte impacto sobre
todo en el sector joven y profesional tales como Facebook, Twitter, Instagram,
WhatsApp o iMessage llamados escenarios virtuales, lo cual representan nuevas herramientas
de trabajo de salud en general. Una de las consecuencias de la salud
comunitaria es la implementación de redes.
Hasta antes que se asentara la salud
comunitaria, había un predominio de la concepción biomédica, es más, por los
años 70 se tenía la idea de que todo lo referente a salud se hacía en los
hospitales eso dio inicio a lo que se llamaba los chequeos anuales que se
hacían las personas en los centros, pero que, ante la explosión demográfica,
así como la migración; los centros hospitalarios comenzaron a saturarse y hoy
vemos algunos colapsados. “El modelo biomédico pues, priorizaba los aspectos
biológicos en la producción de la enfermedad; se centra en el individuo como
objeto de estudio y tratamiento, sin tener en cuenta sus complejas relaciones
con la realidad, centrándose su quehacer en el ámbito hospitalario” (Pimentel,
Correal).
A 1977 George Engel desarrolló el nuevo
enfoque de atención en salud al que denominó biopsicosocial, lo que obligaba a
la comunidad académica a revisar el concepto de salud hegemónico; queda decir
que la concepción biomédica nos puede generar problemas por lo imposible de
hacer un abordaje colectivo, tiende – en otros casos - a normalizarse y por
tanto se va perdiendo información de carácter subjetivo.
Ante ello se hacía necesaria nuevas
estrategias que ya estaban planteadas como directivas en la reunión de Alma Ata
(1978) pero que en los últimos años a través de las reformas de la salud y
sobre todo de la experiencia médica en los hechos de la salud, han visualizado
la necesidad de hacer promoción de la salud, así como prevención y
socialización de la salud elementos claves para el desarrollo de la salud
comunitaria, esto solo pudo haber ocurrido si se ampliaba los conceptos y
paradigmas de salud y enfermedad, así “mientras que las intervenciones
preventivas se direccionan a evitar la aparición de enfermedades específicas,
la promoción de la salud apunta a mejorar la salud en general, extendiendo
inclusive el concepto de promoción para abarcar temas ambientales, políticos,
sociales, económicos etc. Ver figura.
Según
Pimentel y Correal la salud en sus nuevas dimensiones y concepción, es una
construcción cotidiana, un fenómeno susceptible a mejorar, al respecto, aquí
tenemos algunos aportes de delinear una definición de salud:
·
Dimensión comunitaria
·
Proceso dinámico
·
Incluye aspectos objetivos y
subjetivos
·
Es multifactorial conocidos y
desconocidos.
Las aseveraciones arriba planteadas nos
llevan a unificar conceptos o al menos hacerlo atingentes tales como: “Atención
Primaria en Salud”, “Medicina Social”, “Medicina Comunitaria”, “atención
Primaria Orientada a la Comunidad”, Salud Pública y otros más. Teniendo esto
claro y como dice Pimental, Correal, “la acción comunitaria para la mejora de
la salud no debería estar determinada de manera clásica de las intervenciones
en salud, establecidas de forma vertical de arriba abajo, desde la academia o
el gobierno hacia la población. Más bien las intervenciones deberían ser
generadas en el sentido contrario: desde la comunidad y el equipo al nivel
organizador” estamos pues entonces a un sentido más social y político de la
salud, como decía Rudolf Virchow (1821-1902) “La política es medicina en
grande”.
Dice además Pimentel, Correal: “Se podría
afirmar que el “estudio de la salud comunitaria” es al mismo tiempo un “estudio
epidemiológico” de los asuntos de la
salud, un “estudio sociológico” de las necesidades de salud sentidas por los
miembros de la comunidad y un “estudios económico” de las condiciones de vida
de la gente”, como se ve todo ello nos lleva a un trabajo participativo,
intersectorial e interdisciplinario de desarrollo social, que a futuro ha de
constituirse en pilar fundamental de la salud comunitaria. Ver gráfico